Alexandria Ocasio-Cortez, de 28 años y origen hispano, se impuso en Nueva York a Joe Crowley, el cuarto demócrata de mayor rango en la Cámara de Representantes y congresista desde 1999, con un 57,5% de los votos y en noviembre se enfrentará al republicano Anthony Pappas.

Es la primera vez desde 2004 que un demócrata que defiende su escaño en el Congreso no consigue su reelección en unas primarias. La protagonista de esta hazaña es una millenial que trabajó en la campaña de Bernie Sanders en las primarias demócratas previas a las elecciones presidenciales de 2016 y en la oficina del senador por Massachusetts Ted Kennedy mientras realizaba estudios de economía en la Universidad de Boston. Su elección en noviembre está prácticamente asegurada, dado que tradicionalmente el distrito 14 de Nueva York vota demócrata, una zona residencial integrada principalmente por grupos demográficos minoritarios. De hacerlo, se convertiría en la mujer más joven en ser elegida como congresista a la Cámara de Representantes de EEUU.

Ocasio-Cortez, hija de padres de origen puertorriqueño, se ha dedicado hasta ahora al activismo. Su participación en la organización de la comunidad en la que se crió le sirvió de experiencia para después haber podido gestionar y dirigir esta campaña política. Una campaña que se concentró en la necesidad de llegar a «los jóvenes (…) las comunidades de color, las personas que hablan inglés como segunda lengua, la clase trabajadora, las personas con dos trabajos que suelen estar demasiado ‘ocupadas’ para votar». Además, Ocasio-Cortez también se caracterizó por dirigirse a sus electores con spots en español como éste y por contar con una página web tanto en inglés como en español.