Los últimos datos ofrecidos por el Departamento de Trabajo de Estados Unidos han sido positivos para los estadounidenses en general y para los hispanos en particular. Abril se ha encumbrado como el mes 91º en el que crece el empleo de manera consecutiva en el país. En concreto, la tasa de desempleo entre los hispanos se ha mantenido en el 4,8%, una relación pareja al mínimo histórico que se ha dado entre la comunidad: el 4,8% con el que empezó el 2018.
En términos nacionales, el paro está todavía más bajo, alcanzando el levemente el 3,9% del total de la población activa. Este porcentaje representa un mínimo histórico federal que no se recogía desde el 2000. La bonanza económica de EEUU se deja sentir también en los hogares estadounidenses gracias, en parte, a que la media salarial aumentó en 4 centavos la hora el pasado mes, equivalente a un 0,1%, para situarse en 26,84 dólares, con lo que en el último año se ha incrementado en un 2,6%. Durante abril, y según el reporte del Departamento de Trabajo, se generaron 164.000 nuevos puestos de trabajo.
De este modo, el optimismo económico con el que los hispanos afrontaban el comienzo del año se certifica durante estos primeros meses. La importancia de la comunidad hispana en la economía nacional es clave y Desde la Universidad de Georgia, se estima que para 2021 el poder adquisitivo hispano esté en 1,5 billones de dólares, frente a los 1,4 billones con los que se cerró el 2016.