El pasado 1 de febrero se disputó la 49º edición de la Super Bowl. Se denomina así a la final jugada para determinar al ganador de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL). La gran fiesta del fútbol americano, que se disputa el primer domingo del mes de febrero, reunió a los New England Patriots y los Seattle Seahawks quienes lucharon por hacerse con la Super Bowl XLIX en el Estadio de la Universidad de Arizona.
Esta final se disputó por primera vez en el año 1967, con el nombre de “First World Championship Game AFL VS NFL”, ya que enfrentaba a los campeones de la entonces llamada American Football League y la National Football League. Tras la unificación de ambas ligas americanas de fútbol americano, cada una se convirtió en una conferencia distinta dentro de una misma liga, la National Football League (NFL).
El nombre de Super Bowl fue propuesto por Lamar Hunt, propietario de los Kansas City Chiefs y fundador de la AFL. Lamar Hunt explicó que su idea se le ocurrió tras ver a su hijo jugar con una pelota a la que se le llamaba “Super ball” mientras que “Bowl” era un término utilizado para referirse al trofeo conseguido por el ganador de las ligas universitarias.
Desde 1971 se decidió bautizar al trofeo, valorado en 17.000 dólares, como Vince Lombardi, en honor al difunto entrenador de los Green Pay Packers de Wisconsin, quien murió víctima de un cáncer. Lombardi fue el primer entrenador en conseguir ganar la Super Bowl. La final de fútbol americano es sin duda uno de los eventos más vistos del mundo, y el deporte más consumido en Estados Unidos. El año pasado registró la mayor audiencia de la historia en este país para un evento televisivo, según datos de la consultora Nielsen. El encuentro reunió frente a las televisiones del país a 111,5 millones de espectadores. En redes sociales, durante la final del año pasado se enviaron en Twitter más de 24,9 millones de ‘tuits’
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. En Facebook, más de 50 millones de usuarios generaron más de 185 millones de interacciones (publicaciones, comentarios o «me gusta») relacionadas con la Super Bowl.
El pasado día 1, el fútbol americano reunió a los New England Patriots y los Seattle Seahawks quienes lucharon por hacerse con la Super Bowl XLIX en la Universidad de Arizona, pero quienes finalmente se alzaron con el trofeo fueron los primeros. La NFL elige la sede con tres años de antelación, y se valora que la ciudad candidata reúna las condiciones de aforo, seguridad e instalaciones adecuadas, puesto que el encuentro está considerado desde 2002 como «Evento especial de Seguridad Nacional» por parte del Servicio Secreto de los Estados Unidos. Aunque este año asistir al evento será el más barato de la última década, ser testigos en Arizona de un capítulo histórico cuesta de media alrededor de 2.879 dólares.
Por ser uno de los eventos más vistos, sus espacios publicitarios cotizan en alza. Los comerciales durante el partido de Super Bowl son los más caros de la televisión en Estados Unidos, por lo que muchas empresas deciden comprar esos espacios para emitir sus anuncios más costosos y sus mayores producciones. Generan tanta expectación que el pasado año se llegó a pagar hasta 4 millones de dólares por tan solo 30 segundos de espacio publicitario en la pausa de la gran final de la NFL. Este año, el descanso más esperado, además de los anuncios, contará con la actuación de Kate Perry acompañada de Lenny Kravitz.
