Como cada año desde 1988, Estados Unidos celebra del 15 de septiembre al 15 de octubre el Mes de la Herencia Hispana para reconocer la historia, tradiciones y contribución a la sociedad y cultura americana de las comunidades hispanas, así como su importante presencia en la población del país hoy en día.
La historia de esta celebración anual comienza en 1968 con la aprobación de la Ley Pública 90-498. El entonces presidente Lyndon Johnson dictaba que la semana del 15 o 16 de septiembre de cada año se celebraría la Semana de la Herencia Hispana para reconocer la cultura, historia y tradiciones de la comunidad latina.
La elección de esta fecha no fue algo casual. El día 15 de septiembre se conmemora la independencia de cinco países centroamericanos: Costa Rica, Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua; el 16 la de México y el día 18 la de Chile.
Veinte años más tarde, bajo la presidencia de Ronald Reagan, la Semana se convirtió en el Mes de la Herencia Hispana y se fijó entre el 15 de septiembre y el 15 de octubre para incluir el día 12 de octubre, en Día de la Hispanidad y el festivo Columbus Day de Estados Unidos.
El 17 de agosto de 1988, el Congreso aprobó la Ley Pública 100-402 que derogaba la anterior y desde entonces cada año todos los presidentes han proclamado esta celebración en todo el país animando a las instituciones, organización no gubernamentales, centros educativos y comunidades a celebrar y homenajear a los hispanos del país.
En su proclamación de este año, el Presidente Barack Obama ha recordado que «a lo largo de nuestra historia, nuestra nación ha sido enriquecida por todos los que llaman a los Estados Unidos de América su «casa». «La comunidad hispana de Estados Unidos ha jugado un papel muy importante en la formación de nuestro carácter nacional. Este mes, honremos su patrimonio y, al mismo tiempo, reafirmemos nuestro compromiso para construir un brillante futuro con esperanza, lleno de oportunidades para ellos, sus familias y el país que amamos», añadió.
«Los hispanos contribuyen al éxito de nuestra nación de manera extraordinaria – que sirven en las fuerzas armadas y el gobierno, asisten a escuelas en todo Estados Unidos, y fortalecer la economía«, proclamó Obama. «Cada día, vemos el tremendo impacto que los hispanos tienen en nuestras comunidades y refleja una verdad perdurable en el corazón de nuestra nación: no importa de donde vienes o donde están tus raíces, con trabajo duro y perseverancia se puede hacer América».