Antonio Pérez Henares nació en Bujalaro (Guadalajara) en 1953. Escritor y periodista desde los dieciocho años. Es autor de una magnífica novela histórica que recrea la fascinante vida de Álvar Núñez Cabeza de Vaca, el español que mejor comprendió el modo de vida indígena en el siglo XVI en su incansable aventura por el sudeste y el sur de lo que es hoy Estados Unidos. Le entrevistamos para conocer mejor a este increíble personaje.
Comencemos por lo fundamental ¿De dónde sale Álvar Núñez Cabeza de Vaca? ¿Cómo se forja este personaje?
Es un hidalgo jerezano, huérfano desde muy niño de padre y madre. Su abuelo fue Pedro de Vera, gobernador y conquistador de Gran Canaria y su tío Pedro de Estopiñán, a quien adoraba, conquistador de Melilla. Se crio con su abuela y su tía, dos Cabeza de Vaca. Soldado en Italia, alférez en La Gaeta, tomo parte en la guerra comunera en el bando realista con las tropas de los duques de Medina Sidonia, a cuyo servicio entró, en la toma de Tordesillas y en la batalla de Villalar donde vio decapitar a los líderes comuneros. Su gran amigo en la odisea americana y superviviente con él de la desastrosa expedición de Narváez, el capitán Castillo Maldonado muy posiblemente era familiar muy directo del comunero salmantino Francisco Maldonado, ajusticiado aquel día . Álvar era un hombre curtido, cercano a los 40 cuando embarca hacia América
La suya es una historia de desventuras y, pese a todo, sale adelante. ¿Cómo se puede entender que nunca cejara en su empeño? (¿supervivencia? ¿aventura? ¿insensato?):
Determinación, capacidad de sufrimiento, liderazgo, carisma y fe. La palabra que se repite más veces en su libro comentarios es Dios. Hay que acercarse a aquellos hombres con los parámetros de su época, y no los de la nuestra, que es el disparate continuo y que culmina en una condena estúpida sobre ellos y sobre la epopeya hispana en el Nuevo Mundo. Para ellos, el conquistar tierras para su rey y llevar el cristianismo, amén de conseguir gloria y fortuna, claro, era lo más noble que podía hacerse.
¿Cómo fue su travesía por el sudeste-sur de Estados Unidos?
Llega a la Florida, se internan en la selva, solo encuentran selvas, pantanales y los terribles flecheros seminolas. Regresa a la costa y construyen unas rudimentarias barcas para ir costeando. Dos barcas con cerca de 90 hombres llegan a la isla de Mal Hado (Galveston). Caen en manos indias, prisioneros y esclavos. Hambruna. Tras el invierno solo quedan 15. Al cabo de unos años más solo quedan cuatro. Álvar ha aprendido lenguas indígenas y se ha movido como buhonero. Comienza a tener fama de sanador. Huyen cuatro, Castillo, Dorantes, su sirviente, el Negro Estebanico y él. Recorren siempre hacia el oeste miles de kilómetros de tribu en tribu, creek, comanches, sioux, Álvar extrae y una flecha al hijo de un jefe y se convierte en el gran chamán, comienzan a ser venerados como enviados del cielo, pasan por territorio apache, tarahumara y llegan a los indios pueblos a los que Álvar admira y protege. Tras nueve años de andadura topan ya con los castellanos y se llevan un inmenso disgusto. Contraviniendo las leyes de la corona, pretenden esclavizar a los indios que van con ellos. Álvar se enfrenta a ellos. A la postre el responsable, Nuño Beltrán de Guzmán acabará muriendo en prisión por ello.
Más allá de su propia historia de superación: ¿Cuál fue su legado? ¿Se puede apreciar hoy en día?
En su tiempo gozó de prestigio y fama tras su vuelta de esa primera aventura americana, donde conoció ya en México a Cortés y al Virrey, Antonio de Mendoza, hijo del conde de Tendilla, primer alcaide de la Granada cristiana, y hombre cabal y prudente. Hizo un segundo viaje, descubriendo en él las cataratas de Iguazú, como Adelantado y Gobernador del Mar de la Plata. Por defender a los indígenas guaraníes los capitanes españoles lo hicieron preso y lo mandaron cargado de cadenas a España. Felipe II lo rehabilitó. Profesó en un un convento de Jerez donde murió. Otros dicen que fue en Valladolid.
¿Por qué este desconocimiento sobre su figura?
Su figura queda ensombrecida pues en ese momento son muchos los grandes nombres y sus conquistas y descubrimientos cambian la faz del mundo, México, Perú, el Pacifico, la vuelta al mundo, opacan a otros igualmente formidables. A la postre y hoy, por mor de la Leyenda Negra asumida y a veces más que por nadie por los propios españoles, su figura es ignorada y por ignorancia, escarnecida. De todas esas increíbles epopeyas y aventuras hemos sido incapaces de hacer siquiera una sola película digna. Los americanos de bajar los caballos y las vacas de donde nosotros los habíamos subido han creado un género: el Far West.
Finalmente, ¿Cuál sería la mejor manera de evitar que su legado “naufrague”?
Como el de toda nuestra historia y sus personajes, conociéndolos. La ignorancia, el prejuicio, el presentismo y las antojeras ideológicas hacen que muchos españoles se avergüencen de su propia historia, de sus propios antepasados y de todos como Nación y como pueblo, cuando es una de las más brillantes y determinantes del devenir del Mundo.
Puedes escuchar el capítulo sobre Álvar Núñez Cabeza de Vaca de nuestro podcast «La otra historia» aquí.