Daniel Ureña, Presidente de The Hispanic Council, analiza las claves de la victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales de EEUU.

1. Comienza la era Trump.

Donald Trump lo ha conseguido. A partir del próximo 20 de enero, comenzará la Administración Trump. Lo que hace poco más de un año parecía una excentricidad hoy es una realidad. La campaña más negativa de la Historia ha sido aprovechada por Trump para convertirse en el presidente número 45 y romper todas las previsiones.

2. El voto oculto, el otro ganador.

El Presidente Trump le debe su victoria al llamado «voto oculto». La teoría de la «espiral del silencio», que explica que cuando socialmente una opinión es rechazada aquellos que la comparten prefieren no hacerla pública, ha sido una de las claves del éxito de Trump. El espíritu del Brexit ha marcado esta campaña.

3. Se abre un periodo de gran incertidumbre.

La presidencia de Trump abre también una etapa de fuertes incertidumbres a nivel nacional, internacional, económico y social. La profunda división interna que plasman estos resultados, junto con la falta de concreción de buena parte de la agenda de Trump despierta muchas dudas sobre el futuro de Estados Unidos.

4. La ruptura entre la sociedad y la política se evidencia en las urnas.

Este 2016 está demostrando a nivel electoral en todo el mundo que existe una ruptura entre los ciudadanos y la política y Estados Unidos no ha escapado de ello. Trump se ha posicionado durante toda la campaña como el cambio, el candidato anti establishment que traerá un aire nuevo en la dirección del país y los ciudadanos han apoyado esta opción con su voto. A partir de ahora el Partido Republicano tiene que hacer frente a una una situación insólita en la que varios líderes del partido han dado la espalda al próximo Presidente. Por su parte, Hillary Clinton, junto con el Partido Demócrata, ha fracasado estrepitosamente en su campaña y probablemente será el fin de su carrera política.

5. El Partido Republicano mantiene la mayoría en el Congreso.

Además de Presidente y Vicepresidente ayer los estadounidenses elegían a los 435 miembros de la Cámara de Representantes, 34 de los 100 miembros del Senado, 12 gobernadores y decenas de cargos estatales y locales, entre otras cuestiones. Los demócratas tenían la opción de recuperar la mayoría del Senado, clave para una hipotética presidencia de Hillary Clinton, y tenían algo más complicada la mayoría de la Cámara de Representantes. Finalmente ambas cámaras tendrán mayoría republicana, lo que facilitará la tarea al Presidente Trump en un sistema en el que el equilibrio de poderes entre el Legislativo y el Ejecutivo es un pilar fundamental de la democracia.